Comprar
un departamento no es tan fácil como parece, hay muchas variables a tener en
cuenta, y lo mejor es analizar cada una de ellas si queremos obtener nuestro departamento
ideal.
La constructora: para evitar fraudes y contratiempos, es mejor
averiguar sobre la empresa que nos vende, conocer su reputación, sus proyectos
anteriores, si ha cumplido con lo que prometió a otros clientes, consultar si
realmente es propietario del proyecto, si tiene el permiso de dicha obra y si
el terreno figura a su nombre en registros públicos.
Número de departamentos: fíjate cuantas personas más vivirán en el
edificio, mientras más personas, el mantenimiento podría ser más barato; pero a
su vez la convivencia puede que no sea tan fácil.
Ubicación: fijarnos si es un punto céntrico, si es
accesible en auto, si tiene cerca paraderos de autobús, si hay tráfico en horas
punta, si tiene tiendas cercanas, parques, etc.
Pago de arbitrios: de acuerdo a la zona y a los m2 que pueda
tener el departamento, el costo de los arbitrios aumentará. Para que no te
lleves una sorpresa será mejor que averigües el estimado que tendrás que pagar
mensual o anualmente al municipio.
Pago de mantenimiento: el costo por el mantenimiento del edificio
depende mucho de la infraestructura y los espacios comunes. Piensa bien si es
necesario para ti un edificio con gimnasio, piscina, área de parrilla, etc. y
si los usarás, pues finalmente tú también terminarás pagando su mantenimiento.
La caída del sol: Puede parecer que no tiene tanta importancia,
pero en época de verano, si el sol cae frente a nuestras ventanas, el calor en
el departamento puede ser insoportable.
Finalmente
te aconsejamos que estés muy seguro de lo que vayas a comprar pues vas a adquirir
una deuda por varios años de tu vida, y vas a vivir en ese lugar por mucho
tiempo. Asegúrate de resolver todas tus dudas acerca del departamento y de
todas sus variables.